viernes, 23 de mayo de 2008

A Onetti también le gustaba.

Nunca olvidaré aquella terrible experiencia.
Es como si hubiese quedado grabado a fuego en mi mente cada uno de los espantosos detalles que formaron parte de la historia completa de mi aventura en los lejanos espacios siderales.

Comienzo de "Cementerio Cósmico", de Curtis Garland (uno de los seudónimos de Juan Gallardo Muñoz).

viernes, 16 de mayo de 2008

infierno

Cuéntase que Macario, un día en que iba por la montaña, vio un cráneo de muerto yaciendo en tierra. Macario removió la cabeza, y entonces esta respondió.

Macario dijo: ¿Quién eres, tú que me hablas?

El cráneo dijo: Soy griego, del tiempo de los gentiles.

Macario dijo: Y yo, ¿quién soy?

El cráneo dijo: Tú eres Macario, el pneumatóforo.

Macario dijo: ¿Estás en el reposo o en el sufrimiento?

El cráneo dijo: Estoy en los tormentos.

Macario dijo: ¿De qué suerte son tus tormentos?

El cráneo dijo: Hay un río de fuego que hierve sobre nuestras cabezas - tan alto como el cielo y otro río debajo de nosotros. Nosotros estamos en medio, sin que nuestros rostros puedan ver los otros rostros, pero nuestras espaldas están unidas las unas a las otras. En el momento en que se hace una plegaria por nosotros, recibimos un poco de reposo.

Macario dijo: ¿En qué consiste ese reposo?

El cráneo dijo: Durante un parpadeo, nos vemos el rostro los unos a los otros.

De los Apotegmas coptos de Macario el Viejo, citado en Los Hombres ebrios de Dios, de J. Lacarrière.

sábado, 3 de mayo de 2008

Sigue Siendo Rocanrol